lunes, 24 de agosto de 2009

Atrévete al blanco y negro

Blanco y negro
Me gusta mucho la fotografía en color. Pero hay veces que una foto simplemente queda mejor en blanco y negro. Puede ser que el color saca la atención del sujeto, como en el primer ejemplo.

De hecho, debería hablar de monocromático, ya que después de su conversión a blanco y negro, me gusta volver a añadir un poco de color, como el sepia. Más de esto abajo.

Blanco y negro
La foto original de los tés mostraba una mezcla de colores pastel, con ayuda de la luz suave que pasaba a través del toldo de la tienda. Convertiéndola a blanco y negro ganó automáticamente en contraste, ya que cada color se convirtió en un tono de gris diferente, con un gama de tonos muy rico como resultado.

¿Cómo convertir a blanco y negro?

Hace muy poco tiempo, la respuesta por defecto era Photoshop, a través de una de las diez mil posibilidades que tiene para llegar a un resultado similar, pero lo suficiente diferente para tener que probarlas todas a ver cual va mejor para la foto en cuestión.

Ahora, mi manera favorita para conseguir un blanco y negro es a través de Lightroom. Este programa dispone de unos deslizadores que permiten escoger el tono de gris para cada color. De esta manera es posible copiar los efectos de la era de la película. Antes, cada película tenía su propia respuesta a un cierto color. Ahora tenemos todo en mano para convertir a blanco y negro de la manera que nos gusta más.

Cuando tengo la foto a punto, vuelvo a añadir un toque de color con la pestaña "Split Toning" para un efecto ligero de color sepia.

Blanco y negro
Lo mejor de todo: en Lightroom es muy facil guardar todos estos ajustes en un preset, y aplicarlos en un momento a toda una serie de fotos. Así todas tienen el mismo look.

¡Fácil!